Había una vez...

Adivina a quién encontramos éste verano, dormido en su escondite a plena luz del día?

qué emoción y tan de cerca!  yo sólo le ví de espaldas, pero Eloy recibió un verdadero regalo porque le miró a los ojos antes de salir huyendo.Al día siguiente armados hasta los dientes con nuestras cámaras nos dirigimos de nuevo a la misma hora y en el mísmo lugar , y allí estaba durmiendo, al escuchar nuestros ruidos( nos quedó claro que no servimos para espías) el animal se despertó, se plantó delante nuestro y nos dijo:
he tenido mucho gusto en conoceros,ya véis que estoy bien, tengo un pelo muy lustroso y un cuerpo fuerte signos de que me encuentro a gusto en mi entorno y de que no me falta el alimento,pero si venís a visitarme me tendré que buscar otro refugio y eso es tan difícil para mi supervivéncia! pensad que para vosotros también es muy difícil encontrar un lugar seguro,  digno y respetable para vivir
Tenía toda la razón y ya no volvímos

                                                        buuu!

la ropa que confeccioné en un  principio para el zorrito y que tuve que descartar porque según Eloy:" los zorros no se visten de labrador" y fué él quién me dijo cómo debía vestirlo.
Ahora, cuando me acuerdo de él me pongo tan alegre como cuando escucho a estos chicos :):):)